En la vida de todos, la adaptación constante a cambios es una realidad innegable. Ya sean decisiones conscientes, como la elección de una carrera, la compra de una casa o el matrimonio, o acontecimientos inesperados, como la pandemia de COVID-19, los seres humanos deben ajustarse a nuevas circunstancias. Uno de los desafíos más significativos en este proceso es el duelo, una reacción natural a la pérdida de algo o alguien querido. En este artículo, exploraremos el impacto del duelo en la vida de las personas y cómo enfrentarlo.
¿Qué es el duelo?
El duelo se define como la reacción ante la pérdida de una persona amada o de algo que tiene un valor significativo en la vida de alguien. Sigmund Freud, en su obra “Duelo y Melancolía” (1917), lo describió como una respuesta normal y esperada. Aunque puede perturbar profundamente la vida de quien lo experimenta, no debe considerarse una enfermedad. Con el tiempo, las personas pueden superar la pérdida y seguir adelante.
El dolor y duelo
El dolor es una parte intrínseca del duelo, ya que refleja la importancia de lo que se ha perdido. Si alguien no siente dolor o tristeza tras una pérdida, es posible que la pérdida no tenga un significado significativo para esa persona. Cada pérdida es única y subjetiva; lo que representa para una persona puede ser diferente para otra. Por ejemplo, la muerte de una mascota puede generar un profundo dolor debido al vínculo especial que tenía con su dueño.
Las personas manejan el dolor de la pérdida de maneras diversas. Pueden negar la pérdida, distraerse de ella o enfrentarla directamente. Freud destacó la importancia de realizar un trabajo de duelo, un proceso en el cual la mente procesa emociones, pensamientos y recuerdos relacionados con la pérdida. La mente no puede quedarse quieta frente a la pérdida; debe esforzarse por aceptar que lo perdido no regresará. Este proceso puede ser desafiante, pero es esencial para avanzar.
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La creencia común de que “el tiempo lo cura todo” es una falacia. El tiempo por sí solo no garantiza la superación de la pérdida. Como se mencionó en un episodio de la serie “Dr. House”, tomar medidas activas es fundamental. Hacer cosas puede cambiar las cosas, mientras que la inacción mantiene las cosas como estaban. Es necesario abordar la pérdida de manera proactiva.
Buscar ayuda profesional
Si una pérdida persiste a lo largo de los años y afecta negativamente la vida de alguien, buscar ayuda profesional es una opción sensata. Los terapeutas pueden ayudar a comprender el significado de la pérdida y proporcionar las herramientas necesarias para superarla. El objetivo es recuperar el amor por la vida y evitar un estancamiento crónico.
El duelo es un proceso natural que todos enfrentamos en algún momento de la vida. Cada pérdida es única y subjetiva, y el dolor que conlleva es una señal del amor y significado que tenía lo que perdimos. Superar el duelo implica enfrentarlo de manera activa y, en algunos casos, buscar ayuda profesional. Recordando las palabras del psicoanalista Sergio Alonso Ramírez: “Solo podemos ganar si aprendemos a perder”. El duelo, aunque doloroso, puede conducir a un crecimiento personal y a una apreciación renovada de la vida.
Acerca del autor:
Francisco Álvarez Ramírez es un psicólogo online que dedica a trabajar con un modelo de psicoterapia psicoanalítica, el cual permitirá entender los motivos reales de las situaciones que te aquejan: crisis de ansiedad, ataques de pánico, sentimiento de abandono, entre otros. Agenda una cita con Francisco
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